Los reyes de la baraja de cartas de póker
Picas: Rey David
Según la biblia hebrea, David fue un rey israelita y segundo monarca legítimo del reino de Israel. Nacido en el año 1040 a.C. en Belén, es considerado justo, valiente y apasionado, aunque no exento de pecados. Unificó el territorio de Israel y lo expandió, controlando las ciudades de Jerusalén, Damasco, Samaria, Zabah y Petra. Es honrado como rey y profeta en el judaísmo, el islam y el cristianismo. Su elección como rey del palo de picas o espadas tiene mucho que ver con su sentido de la justicia, ya que las espadas son elementos que simbolizan la fuerza de la ley y la firmeza de las decisiones.
Tréboles: Alejandro Magno
La figura del rey en este palo está representada por Alejandro Magno, rey de Macedonia y uno de los más importantes de toda la historia. Su nacimiento tuvo lugar en el 356 a. C y sus padres fueron Olimpia de Epiro y Filipo II de Macedonia. Ya desde niño recibió formación militar para reinar, mientras que la intelectual, recayó sobre Aristóteles. Antes de convertirse en rey, fue exiliado junto a su madre por parte de su padre, puesto que lo consideraba un hijo adúltero. Tras el asesinato de Filipo, se produjo su ascenso al trono. La conquista del Imperio Persa fue uno de sus grandes hitos y antes de morir envenenado, tuvo una suerte extraordinaria al salir ileso de numerosas batallas. Es por esto por lo que fue designado como el rey de tréboles de la baraja francesa.
Corazones: Carlomagno
Nacido en el 742, Carlomagno fue rey de los francos, rey nominal de los lombardos y el primer Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico desde el año 800 hasta su muerte en el 814. Su ideal era la unión de los países de Europa Occidental y la reconstrucción del Imperio Romano. Promovió el orden, el derecho y la cultura, siendo un estupendo gobernante de su imperio en el que fundó escuelas y bibliotecas. Además, actuó como mediador para solucionar problemas derivados de la religión u otros temas. Es reconocido como uno de los monarcas con el corazón más noble y por este motivo, se le asignó la figura del rey de corazones.
Diamantes: Julio César
Este político y militar nacido en Roma en el año 100 a.C., llegó a la cumbre del poder tras vencer en la guerra civil que mantuvo contra el sector más conservador del senado romano. Con tan solo 20 años y con ansias de poder, se unió a Craso y a Pompeyo para crear un triunvirato, pero tras observar diferencia de intereses, comenzaron las rivalidades. Al morir asesinado Pompeyo en Egipto, Julio César ascendió al gobierno como dictador. Desde su posición privilegiada, acabó con las revoluciones en Asia Menor, modificó el sistema de impuestos y ayudó a Cleopatra a convertirse en reina, entre otros hechos. El rey de diamantes fue la figura otorgada a Julio César debido a su codicia y avaricia, dos rasgos muy característicos en su estudiada personalidad.
Deja tu comentario